España depende del pescado de otros países durante 8 meses al año, haciendo cada vez más vulnerable a la industria pesquera y los puestos de trabajo que dependen de ella; pero tiene en la propuesta de ley española de pesca sostenible y en la reforma de la política pesquera común (PPC) una oportunidad única para restaurar caladeros nacionales y europeos.

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Fish dependence
The increasing reliance of the EU
on fish from elsewhere

Este es el mensaje lanzado por Ecologistas en Acción, Ent (Enviroment and Management) y New Economics Foundation (NEF), representantes de la coalición OCEAN 2012 en España y Reino Unido, durante la presentación de los resultados del informe Fish Dependence .

España consume mucho más pescado que el que sus aguas son capaces de producir. Las provisiones de pescado españolas duran unos cuatro meses, y a partir de entonces depende de pescado de otros países según el informe elaborado por NEF y la alianza OCEAN 2012 que agrupa 90 organizaciones en Europa, entre ellas Ecologistas en Acción, que trabajan por una Política Pesquera Común (PPC) que garantice el futuro de los caladeros y el ecosistema marino del que dependen.

El declive de los caladeros de pesca europeos combinado con un creciente consumo cada vez nos obliga a importar más pescado o a tener pescar más lejos. El informe ilustra la creciente dependencia de pescado extranjero.
Los principales resultados del informe muestran que:
- Dos de cada tres pescados consumidos en España provienen de aguas no europeas.
- España comienza a depender de pescado del resto del mundo dos meses antes que la media de la Unión Europea (9 julio), y esta fecha se ha adelantado respecto a la del año 2000.
- La acuicultura reduce el ritmo de dependencia de pescado exterior pero aún con todo no evita que ésta siga creciendo. Si descontamos la producción acuícola, la fecha en que España empieza a comer pescado no europeo se adelanta del 10 mayo al 25 de marzo.
- Cada ciudadano español consume 41,2 kg de pescado al año; el doble que la media europea y 2,5 veces más que el consumo medio mundial (16,4 kg).

El modelo de consumo y gestión pesquera actual es un modelo insostenible que incrementa la vulnerabilidad del sector pesquero en Europa -poniendo en riesgo el futuro de miles de puestos de trabajo y las comunidades costeras- y que afecta la seguridad alimentaria de países en desarrollo.

“Consumir tanto pescado en un contexto de sobrepesca es un modelo absurdo a nivel económico, inviable a nivel ambiental, e injusto a nivel social.” ha declarado Aniol Esteban autor del informe. “La restauración de los stocks de pesca es una forma eficaz de responder a la crisis económica, garantizando empleo y bienestar a las comunidades pesqueras y sentando las bases de una economía mas fuerte. Aun así, los países de la UE siguen compitiendo por cuota de unos caladeros que cada vez producen menos en lugar de concentrarse en mejorar su productividad.”.

En este sentido Lali Musoles del programa de pesca de Ecologistas en Acción ha declarado “la sobrepesca en aguas europeas ha ido en aumento desde la ultima reforma de la PPC. Hoy contamos con una flota excesiva de barcos preparados para ir a faenar a lejanos caladeros, pasar meses fuera y traer pescado de terceros países. Además, debido a la exención de ciertos impuestos, la pesca en aguas nacionales no puede competir con el pescado importado. La elevada importación y a la ausencia de medidas de protección aboca a la flota litoral del Estado español y de Europa a una grave crisis socioeconómica y a los caladeros a situaciones de sobreexplotación”.

Con el 72% de las reservas de pesca de la UE sobreexplotadas; es imperativo realizar cambios fundamentales a nuestro modelo de gestión pesquera y consumo.

En este sentido Miquel Ortega, coordinador político de OCEAN 2012 en España y miembro de Ent, ha declarado que “la reforma de la Política Pesquera Común y la propuesta de ley de pesca sostenible es una oportunidad de oro para invertir este modelo; devolver nuestras reservas de pesca a niveles satisfactorios y conseguir una distribución de recursos entre países más justa, pero para conseguir estos objetivos es necesaria valentía política por parte del Gobierno y los Parlamentarios españoles”.

“El modelo pesquero español, industrial e insostenible en el tiempo, está en el momento crucial y el debate sobre la reforma pesquera es ahora necesario y urgente, aunque han emergido algunas propuestas puntuales de retorno a una pesca artesanal más sostenible, hoy no son suficientes y no suponen una alternativa total al modelo de pesca vigente”, afirma Lali Musoles de Ecologistas en Acción .