La abundancia de alimento que provocan los afloramientos atrae a los cetáceos.

Elisa Rojo Nieto, Grupo Marino de Ecologistas en Acción y co-coordinadora de la red de varamientos Delphis. Revista El Ecologista nº 61

En el artículo se analiza la relación entre la presencia de cetáceos –medida por la cantidad de varamientos en la costa andaluza– con los episodios de afloramiento que ocurren al sur de Portugal y en el Mar de Alborán.

Los afloramientos o surgencias son, grosso modo, ascensos de agua oceánica profunda, rica en nutrientes, que se producen por la acción de vientos regulares a lo largo de una costa. Existen grandes afloramientos muy conocidos en el mundo, como el de Perú. Otros más pequeños pero de importancia a menor escala, como los dos que se dan al sur de la Península Ibérica en el área estudiada: el Afloramiento Ibérico, en la zona atlántica, y el Afloramiento del Mar de Alborán, en la mediterránea. Ambos son más intensos en verano, abarcando parte de la primavera y el otoño en ciertos casos, pero fundamentalmente tienen un marcado carácter estival.

Los afloramientos son sistemas muy fluctuantes, con mucha heterogeneidad en el espacio y en el tiempo. Como las aguas profundas son más frías y ricas en nutrientes, el ascenso de dichas aguas supone un enriquecimiento enorme en sustancias que provocan grandes incrementos de la producción primaria de las aguas superficiales. De hecho, los sistemas de afloramiento son los sistemas más productivos del océano, ya que en ellos se da un gran aumento de nitrato y fosfato, lo que aumenta la producción del fitoplancton, que a su vez representa la base alimenticia para el resto de la cadena trófica.

La alternancia de presencia de afloramientos y periodos de calma (como ocurre en el caso de los dos afloramientos objeto de estudio) es muy beneficiosa para la productividad biológica. Si inmediatamente después del afloramiento se produce un periodo de calma, se favorecerá un incremento de producción de fitoplancton.

Además del fitoplancton (plancton autótrofo), dominado por las diatomeas, se encuentran comunidades de zooplancton (plancton heterótrofo) y de ictioplancton (larvas de peces, huevos…). En estos lugares dominan los pequeños peces pelágicos, pues tienen altas tasas de reproducción que compensan otras fases de alta mortalidad, es decir, están adaptados a fluctuaciones, permitiendo una recuperación rápida de la población cuando las condiciones son propicias. Los pequeños peces pelágicos que se encuentran en estas zonas principalmente son: la sardina, la cual domina el ecosistema de afloramiento del Sur Ibérico, boquerón, caballa, alacha y jurel. Otros peces también presentes son: pargo, chopa, mero y salmonete.

Varamientos

Un varamiento se produce cuando algún animal marino encalla y queda detenido en aguas poco profundas, en algún obstáculo o en la propia costa, vivo o muerto. De todos los animales marinos que pueden varar, en este trabajo sólo se analizan los cetáceos.

En las aguas costeras de Andalucía pueden observarse habitualmente once especies de cetáceos. Otras cinco especies han sido observadas en la región o han varado en sus costas, pero se consideran raras. Cuatro de estas especies están actualmente consideradas en peligro, y están incluidas en el Anexo I de la Directiva Hábitats, el Catalogo Nacional de Especies Amenazadas o la Lista Roja de la UICN.

El número de varamientos se utiliza como indicador de la época de mayor presencia de cetáceos, partiendo de la base de que el número de éstos es proporcional a la cantidad de individuos presentes en las aguas de la zona. Pero es importante considerar que los datos de varamientos pueden ser tomados como referencia de la abundancia de cetáceos en determinada área, pero no como indicador de la cantidad de cada especie en concreto. Ello es así porque existen especies más propensas a varar, debido a sus hábitos costeros, mayor presión antrópica… mientras que otras tienen menor predisposición, lo que no quiere decir que no se encuentren poblaciones por la zona de estudio. Por lo tanto, se trabajará con los cetáceos como un conjunto, para determinar los meses de mayor presencia.

Labor voluntaria

La asistencia a varamientos en las costas andaluzas es una labor que desarrollan, en su mayoría, redes de voluntarios de asistencia a varamientos, bien pertenecientes a organizaciones no gubernamentales, como Ecologistas en Acción, bien integradas en la Red de Voluntarios Ambientales del Litoral Andaluz, o en ambos. Las competencias en varamientos de especies marinas amenazadas en Andalucía en última instancia la tiene la Junta de Andalucía, y en su nombre el CREMA (Centro de Recuperación de Especies Marinas Amenazadas).

Sin embargo, a efectos prácticos la labor de recopilación de datos no sería posible sin el trabajo de estas redes de asistencia a varamientos, integradas por voluntarios, debido a que es la única forma real y efectiva de cubrir amplias zonas de costa como son las que existen en el litoral andaluz. Por ello, para determinar las épocas de mayor presencia de cetáceos en las dos zonas de estudio se utilizarán datos de la red de varamientos DELPHIS, que opera en el litoral gaditano, de la red de varamientos de PROMAR que cubre el litoral almeriense (ambas integradas dentro de Ecologistas en Acción) y del CREMA (que engloba la totalidad de Andalucía).

Los datos recogidos corresponden a varamientos de los años 2006 y 2007, comparándolos con los datos de otros años para verificar la existencia de unas pautas generales. Las especies que han varado en estos dos años, recogidas en los informes del CREMA, PROMAR y DELPHIS son: zifio de Cuvier, cachalote, delfín común, delfín listado, delfín mular, calderón común, calderón gris, rorcual común, rorcual aliblanco, foca de casco, orca, marsopa, cachalote pigmeo, yubarta o ballena jorobada, zifio de Sowerby y orca bastarda.

A continuación se expone un cuadro resumen de la información analizada de varamientos, una vez estudiados los datos procedentes de las tres fuentes anteriormente mencionadas, donde se muestra los meses o época del año de mayor afluencia de varamientos (tabla 1):

Tabla 1: Épocas de mayor número de varamientos

Año CREMA PROMAR DELPHIS
2006 Vivos: agosto (VERANO)
Totales: agosto con un pico en octubre que no se da otros años (VERANO)
Agosto, seguido de julio (VERANO) VERANO, seguido de primavera y otoño
2007 Vivos: agosto (VERANO)
Totales: agosto (VERANO)
Abril, julio, agosto y septiembre datos similares (VERANO) VERANO, seguido de primavera y otoño

Hay que tener en cuenta que los datos de varamientos no son 100% objetivos, ya que la mayoría de los avisos de presencia de cetáceos encallados son realizados por los transeúntes que pasean por las playas, y el número de estos se incrementa con el buen tiempo. Sin embargo, el aumento durante meses muy concretos del verano (principalmente agosto) es muy claro, mientras que el incremento de paseantes se produce desde el principio de la primavera hasta finales del otoño, por lo que, en principio, en este aspecto los datos son fiables.

Relaciones entre cetáceos y afloramientos

De modo que se ha establecido que la época de mayor presencia de varamientos es el verano, y, por tanto es también la época de mayor presencia de cetáceos en la zona. Asimismo, es durante es el verano la época en la que se encuentran activos los dos afloramientos de las zonas de estudio.

La dieta de los cetáceos, de forma muy general y abarcándolos a todos en un conjunto (odontocetos y misticetos), se podría resumir, a grosso modo, en: calamares y otros cefalópodos; peces pelágicos de pequeño tamaño; peces de mediano tamaño; crustáceos decápodos; eufasiáceos (krill…); atunes, etc.

Como se ha comentado, la mayoría de estos grupos se encuentran íntimamente relacionados a los afloramientos: bien directamente, como en el caso de los eufasiáceos, formando parte del plancton que prolifera en estas surgencias, bien indirectamente, formando parte de eslabones superiores de la cadena trófica (tan productiva) que se genera a causa de los afloramientos y característica de ellos, como son los pequeños pelágicos. De los otros grupos (cefalólopodos, decápodos…) también hay claros indicios de su estrecha vinculación con los afloramientos.

Por todo ello, se puede concluir que tanto la presencia como la abundancia de cetáceos en el Golfo de Cádiz y en el Mar de Alborán (y por tanto un mayor número de varamientos) se encuentran íntimamente relacionadas con los Afloramientos Ibérico (Sur) y del Mar De Alborán, y que este vínculo se relaciona claramente por la alimentación: son precisamente los animales que más proliferan por los afloramientos aquellos que sirven de alimento a las diferentes especies de cetáceos que se encuentran en la zona.