Ben Magec-Ecologistas en Acción se suma a la Mesa Social por el Agua en defensa de la gestión pública y eficiente de este recurso básico y estratégico, y denuncia la presunta intencionalidad con la que las administraciones la han administrado de forma irregular, a fin de justificar su privatización. La Federación ecologista apoya la extensión de este movimiento social a toda Canarias.

La Federación Ben Magec-Ecologistas en Acción manifiesta su apoyo a la lucha contra la privatización de INALSA en la isla de Lanzarote y a favor del carácter público del agua, tanto a la que nace de la tierra de forma natural como a la que se obtiene a través de procedimientos técnicos tales como la desalación. También ha valorado como muy positiva la propuesta de extender a todas las islas este movimiento social, ya que se trata de una legítima reivindicación del movimiento ecologista, ya que el agua es un recurso básico y estratégico que debe ser entendido como patrimonio colectivo de la sociedad.

Por otra parte, la federación ecologista apuesta decididamente por la eficiencia y el ahorro, que consideran tremendamente necesario en unas islas donde el agua ha sido siempre un bien escaso y además sobreexplotado debido a los desmanes de industria turística y a la desidia en su gestión (campos de golf, escapes, piscinas, consumo ordinario, etc.).

Sin embargo, Ben Magec-Ecologistas en Acción aclara que “apoyamos el ahorro, no la imposición de cortes al calor de la actual crisis que está sufriendo gran aparte de la población de Lanzarote. Estos recortes son consecuencia de la nefasta gestión, que sospechamos ha sido la vía para justificar su privatización. En este sentido denunciamos, como hace la Mesa Social por el Agua, las enormes y sangrantes pérdidas en la red de suministro, que han alcanzado hasta el 50%”.

Según la federación ecologista, “el agua no debe ser considerada como una mercancía bajo los dictados del mercado, de grandes empresas o de los históricos aguatenientes que han subyugado y expoliado gran parte de nuestro territorio, su economía y sus ecosistemas, sino como un bien público gestionado desde un control democrático. En esa línea denunciamos los escándalos habidos en Ayuntamientos como Las Palmas o Santa Cruz de Tenerife con los procesos de privatización del agua y con los desfalcos e irregularidades en la gestión con pérdidas multimillonarias”.

En este sentido, Ben Magec-Ecologistas en Acción exige también que se cumpla la sentencia que ha condenado al pago de la deuda acumulada en Lanzarote, con el pago a cuenta de los patrimonios personales de los cargos públicos responsables de su gestión. Según la organización, “se trata de un ejercicio de justicia democrática y un ejemplo para aquéllos que tienen encomendada la gestión pública. Esa responsabilidad patrimonial es la que venimos exigiendo desde Ben Magec-Ecologistas en Acción para todos los casos de desfalco, corrupción y puesta en marcha de gravoso e innecesarios proyectos de grandes infraestructuras, que hoy recaen en el conjunto de la sociedad, ya de por sí muy castigada con la actual crisis económica, especialmente en islas como Lanzarote, donde el incontrolado desarrollismo turístico ha tenido unas fatales y lógicas consecuencias”.

La federación canaria entiende con la plataforma, que el agua es la vida y es uno de los recursos básicos más escasos y preciados, y más para nuestra propia población, en situación de alarma permanente en islas que dependen en mas de un 90 % de la desalación del agua del mar y que puede sufrir contingencias fatales, como las que podrían producir las extracciones petrolíferas que quieren poner enfrente de Lanzarote y Fuerteventura.

Ben Magec-Ecologistas en Acción se suma a la amplia plataforma que se ha creado en la isla de Lanzarote en defensa de la gestión pública del agua, y que hoy recoge el apoyo de un amplio sector de la población y de múltiples y variados colectivos ciudadanos.

Para José de León, historiador y miembro de Ben Magec-Ecologistas en Acción “lo que en el pasado eran las procesiones a la virgen del Socorro para paliar las horrorosas sequías que costó el hambre, la emigración y la muerte a miles de pobladores, hoy es la voluntad organizada de la gente la que no sólo invoca una solución, sino la que tiene las propuestas y la fuerza para conseguirlas. Lanzarote es una isla con una larga tradición de conciencia sobre el ahorro de este preciado recurso, que ha construido y ha ingeniado miles de artificios para su aprovechamiento como maretas, aljibes, alcogidas, etc., que hoy son un extraordinario patrimonio cultural. Hoy esta conciencia se convierte en una lucha ciudadana a favor de un derecho básico, que quiere legar, como una hermosa responsabilidad, a las futuras generaciones. Esta lucha merece ahora nuestro mas decidido apoyo”.