Recientemente se ha hecho público un informe del Comité Científico de los Riesgos Sanitarios Emergentes y Recientemente Identificados (CCRSERI, SCENIHR, en inglés) sobre los posibles efectos a la salud de la exposición a campos electromagnéticos [1]. Las organizaciones firmantes (ONG y plataformas de organizaciones sociales como la Plataforma Estatal Contra la Contaminación Electromagnética (PECCEM), en la que participa Ecologistas en Acción, y la IEMFA denuncian el enfoque tendencioso y sesgado de dicho informe que obvia aquellos estudios que evidencian riesgos de las radiofrecuencias sobre la salud. Señalan que este informe es obra de un grupo de expertos cuestionados por su defensa de tesis negacionistas del riesgo y su posicionamiento a favor de los intereses [cortoplacistas] de la industria, así como denuncian que muchos de ellos tienen conflicto de intereses. Mona Nilsson, presidenta de la Fundación Sueca de Protección contra las radiaciones, manifiesta que “esto podría explicar por qué se han descartado los estudios alarmantes en esta evaluación, especialmente, los concernientes a los tumores cerebrales”. Es urgente que se realice una nueva valoración si no queremos que las políticas de salud estén basadas en datos incompletos y sesgados.

Un grupo de expertos “electroescépticos”

Para conseguir la proeza de realizar un informe favorable a la ausencia de riesgos, mientras se acumulan los estudios que muestran efectos y existe una fuerte controversia en la comunidad científica sobre la cuestión de los riesgos para la salud de las ondas electromagnéticas, se usa una receta bien sencilla: basta con seleccionar un grupo de expertos donde domina la posición favorable a la ausencia de riesgos al tiempo que se sofoca cualquier disidencia. El grupo de expertos creado por la Comisión Europea se compone de personalidades, mayoritariamente miembros del ICNIRP [2], de sobra conocidas por sus posiciones proselitistas a favor de la ausencia de riesgos (ver anexo 3). El ejemplo de Joachim Schüz es especialmente llamativo, cuando se arroga para él la dirección de la parte epidemiológica contradiciendo el principio de la pluralidad e imparcialidad, puesto que él ya había excluido sistemáticamente aquellos estudios que muestran efectos sanitarios relacionando los tumores cerebrales con el uso del teléfono móvil, en el informe previo presentado públicamente en febrero de 2014, a pesar de las objeciones manifestadas por un miembro del grupo (véase Anexo 4) y a la abierta contradicción con las conclusiones de muchos colegas científicos, así como la profunda preocupación por la salud pública manifestada por el Grupo de trabajo BioInitiative. Este grupo negacionista del SCENIHR fue nombrado sin tener en cuenta las anteriores peticiones de una evaluación de expertos transparente, imparcial y pluralista que atienda a las diferentes partes implicadas. (Véase el ejemplo en Anexo 5).

Un grupo de expertos con numerosos conflictos de intereses

Las ONGs y plataformas firmantes recuerdan que muchas de ellas ya denunciaron a la Dirección General de Sanidad y Protección de los consumidores de la Comisión Europea –DG Sanco- (Ver carta de AVAATE/PECCEM) y ante la Defensora del Pueblo Europea la existencia de notables conflictos de intereses en el grupo de expertos sobre campos electromagnéticos del SCENHIR: varios miembros tienen relaciones con la industria implicada, comenzando por su presidente, Theodoros Samaras, que fue asesor de Vodafone, continuando por Matts-Olof Mattsson, miembro del ICNIRP, que junto a Hans K Mild integran el comité científico de la operadora de telefonía móvil Telia Sonera, Zenon Sienkiewicz, miembro del ICNIRP y consultor de Japan EMF Information Center que surgió de Japan Electrical Safety & Environment Technology Laboratories y de Japan Electric Association, así como Anssi Auvinen, miembro del ICNIRP y regularmente financiado por el MMF, Mobile Manufacturers» Forum [3]. La industria se beneficia enormemente de las conclusiones que exponen que no existen riesgos para la salud, mientras pospone costosas regulaciones y rebaja los riesgos de reclamaciones de responsabilidad.

Demandas desde la sociedad civil:

En la línea de las recientes recomendaciones de la Defensora del Pueblo Europea [4] a favor de grupos de expertos más equilibrados y la reducción de situaciones de conflicto de intereses, las ONG's y plataformas de organizaciones sociales implicadas van a presentar una queja ante dicha Defensora del Pueblo y dirigirán una petición a la Comisión Europea con las siguientes demandas:

  • Una investigación exhaustiva sobre la designación, composición y dirección de los grupos de trabajo sobre campos electromagnéticos del SCENHIR, incluyendo las cuestiones del pluralismo, transparencia, influencia corporativa, inclusión de las opiniones minoritarias, participación de las ONGs y organizaciones sociales implicadas y la integración de sugerencias de consulta pública.
  • La anulación de las conclusiones del informe del SCENHIR, por la violación de estas normas
  • La designación de un nuevo de un grupo de expertos sin vínculos de intereses y representativos de la actual controversia científica.
  • Una nueva evaluación equilibrada e independiente.
  • El establecimiento de un comité de diálogo permanente en la DG Sanco, donde los puntos de vista de las partes interesadas puedan ser verdaderamente expuestos y considerados sobre las directrices de la evaluación y la investigación en el ámbito de los campos electromagnéticos.

Anexos:
- Anexo 1: SCENIHR: a biased assessment of EMF health risks – the example of head tumours
http://www.apdr.info/electrocontaminacion/plataforma/Plataforma%20Estatal/comunicados/Anexo_1_SCENIHR_-_Telefonos_moviles_y_tumores_de_cabeza_9_mars-.pdf
- Anexo 2: SCENIHR: a biased assessment of EMF health risks – the example of EHS (disponible próximamente)
- Anexo 3: SCENIHR members» history (intellectual and financial bias). http://www.priartem.fr/IMG/pdf/Annexe_3_-_Encl._3_SCENIHR_Experts_2015.pdf
- Anexo 4: Letter from SCENIHR member Kjell Hansson-Mild on assessment bias. http://www.priartem.fr/IMG/pdf/Annexe_4_-_Kjell_Hansson_Mild_comments.pdf
- Anexo 5: IEMFA's letter to DG Sanco,»Call for Transparent, Impartial and Pluralist Expert Assessment on health risks of non‐ionizing electromagnetic fields (EMF), Nov 14, 2011: http://www.teslabel.be/PDF/Open_letter_to_Commissioner_DALLI.pdf

Primeros firmantes:

[1] El informe Efectos potenciales para la salud de la exposición a campos electromagnéticos fue adoptado el 27 de Enero 2015 por el Comité Científico de los Riesgos Sanitarios Emergentes y Recientemente Identificados (SCENIHR). El informe evalúa la investigación reciente (2009-2013) sobre los riesgos de la salud relacionados con los campos de radiofrecuencia provenientes de tecnologías inalámbricas y campos de baja frecuencia.

[2] ICNIRP es la asociación que ha formulado las guías que están detrás de la mayoría de las actuales normativas sobre CEM. Tiene exclusivamente en consideración los efectos termales (calentamiento de tejidos) y excluye explícitamente la exposición a aparatos inalámbricos más de 6 minutos al día, así como posibles efectos a largo plazo, como el cáncer o enfermedades neurodegenerativas. Su enfoque no protector y su cerrada estructura dan a ICNIRP rasgos de grupo de intereses militares y corporativos, de acuerdo con las organizaciones firmantes. Los expertos de ICNIRP tienen gran influencia en los comités para la determinación de los estándares legales nacionales e internacionales, incluyendo al Proyecto sobre los CEM de la OMS. Véase, por ejemplo: Critic of ICNIRP http://www.chronicexposure.org/limitsICNIRP.html y The Procrustean Approach http://www.emfacts.com/papers/

[4] Recomendaciones del Dictamen de la Defensora del Pueblo Europeo en la investigación de oficio realizada en relación a la composición de los grupos de expertos del Comité Europeo.