La cantera Laherrán sigue funcionando a pesar de que ha pasado ya más de un mes desde que la alcaldesa del ayuntamiento de Piélagos acordara su clausura, al declarar clandestina la actividad de extracción, molienda y clasificación de áridos en dicha cantera.
Ecologistas en Acción de Cantabria ha solicitado el cierre inmediato de la cantera y ha presentado un recurso de reposición contra el acuerdo de la alcaldesa por ser incompleto y no recoger en su resolución de 25 de marzo todas las irregularidades e ilegalidades en que incurre la empresa Laherrán en sus instalaciones de Arce.
La organización ecologista ha solicitado a la alcaldesa que se amplíe la resolución, declarando clandestinas todas las actividades: extracción de áridos de cantera, planta de tratamiento de áridos e instalaciones de hormigonado, y que se ordene la inmediata clausura cautelar de todas ellas.
Ecologistas en Acción agradece que la actual alcaldesa haya por fin tomado alguna decisión sobre las actividades ilegales de dicha cantera que viene funcionando desde hace más de 40 años sin que ninguna administración haya controlado su actividad.
No es la primera vez que se realiza alguna denuncia contra la ilegalidad de dicha cantera. El Seprona realizó una denuncia el 9 de febrero de 2009 a consecuencia de la cual, el alcalde Jesús Pacheco abrió un expediente en el cual existe un informe jurídico que proponía la clausura de la actividad, pero dicho alcalde nunca lo ordenó ni ejecutó.
Tampoco el alcalde Enrique Bolado adoptó decisión alguna cuando la propia empresa inició los trámites para su legalización en el año 2010. Este expediente de legalización nunca se finalizó pues la empresa no presentó toda la documentación que se le demandó. Pero el alcalde de entonces dejó que siquiera realizando la empresa sus actividades sin haber obtenido las licencias para ello, es decir, permitió que funcionara ilegalmente, como venía haciendo desde décadas pasadas.
Las actividades carecen de Evaluación de Impacto Ambiental e integral de todo el complejo industrial, por lo que están afectando al medio ambiente y a la salud de los vecinos, sin que por parte de ninguna administración se esté controlando las preceptivas condiciones de tranquilidad, seguridad y salubridad.
