Este otoño es más el miedo que el frío el que nos está haciendo temblar. Y esto es lo que sentimos, temblores nos dan también al enteramos que hay detrás de CETA, TTIP, TISA, etc. Son los últimos de los miles de tratados de libre comercio que se vienen aplicando, incluso antes de su ratificación, desde el final de la segunda guerra mundial. Estos son los de última generación, la última versión ,y por tanto más perfeccionados, es decir más complejos en su redacción para no dejarse nada sin controlar (lo que ellos llaman paradojicamente desregularizar), retorcidos, y hasta macabros si nos atenemos a la falta de medidas de seguridad alimentaria y medioambiental que suponen.

De la mano de la Plataforma El Puerto contra el TTIP está llegando a través de charlas la preocupación por estos acuerdos negociados en secreto y que empiezan a aplicarse antes de su ratificación incluso. Esta falta total de democracia es la mejor prueba de que lo que están tramando no es nada bueno para la mayoría de la población mundial y una vez que les hemos visto el rostro a los depredadores, no tienen ningún interés en disimular su gran poder para conseguir sus objetivos sí o sí, un ejemplo es la presión que han sufrido los valones por atreverse a decir NO. Cuando nos enteramos de estos y otros pormenores el panorama se ve algo negro, pero como decía alguien no tenemos fuerzas para dejar de resistir. Y sobre todo hay que recordar que si no oponemos resistencia todavía puede ser peor.

Plataforma de El Puerto Santa María contra el TTIP/CETA/TISA.